La historia de la arquitectura mexicana de la segunda mitad del siglo XX no puede ser narrada sin la obra de Teodoro González de León. Sus bancos, delegaciones, museos y corporativos han contribuido a definir el tejido urbano de buena parte del país, mediante un concepto de monumentalidad donde conviven modernidad y atemporalidad. Arquitecto, urbanista, pintor y escultor, González de León es asimismo u activo promotor de la arquitectura como fenómeno cultural.La publicación de su obra completa permite abarcar por primera vez una panorámica que ilustra más de cincuenta años de militancia y compromiso con su disciplina. Sus textos se intercalan en el libro, como sus íconos lo hacen en la ciudad, mostrando el dinamismo de un pensamiento que refleja una constante dialéctica entre obra y reflexión.El rigor conceptual y constructivo de Teodoro González de León ha generado un obra contundente y original, monumental y única, mexicana y universal. Sus arquitecturas están concebidas como ensamblajes con una lógica y una realidad singulares, siendo cada una un párrafo, un capítulo de una historia, de un modo de hacer y entender la arquitectura.