El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Nací en Hardacre en 1888. En aquel entonces sólo había caballos y las calles no estaban asfaltadas como ahora. Mi padre comerciaba con caballos y se odiaba con el vecino. Pero lo que quiero contarles es lo que ese odio le hizo a mi hermano Daniel en 1901. En ese momento comenzó la historia...