Levanta el puno, radiante. Ghita: ,a manola? la multitijo le contesta: ;ngawethup tos hombres que marcan su siglo son excepcionales. Más aun, aquellos cuyos actos cambian las conciencias y la historia de un país, conmueven por su valentía y su determinación. Solemos admirar al creador, al científico, al campeón... Solemos admirar la generosidad y la entrega. Pero no resulta tan común que la admiración y la emoción nos conmuevan. El 11 de febrero de 1990 Nelson Mandela salió de la cárcel después de 27 años de encierro. En el mundo entero lloraron hombres y mujeres, luego rieron, y después cantaron y gritaron de alegría ante el anuncio de su liberación. Se había vuelto un mito. Una vida de combate por la libertad. Una vida de combate desinteresada.