Esta obra relaciona los problemas desde un enfoque crítico en el cual la teoría cultural, la filosofía y la mirada estética se cruzan con la intención de una razón política inconforme. Se plantea la experiencia del presente que tiene la revolución obrera y socialista como pasado, ya no en la línea de horizonte, lo que obliga a revisar las ideas de cambio histórico en los planos sociológico y psicológico, en los imaginarios y en las mentalidades de las nuevas subjetividades y sujetos.