Para quien piense que sólo la universidad del siglo XXI en este o en aquel país del orbe, pudo bajar del imperturbable trono de la sabiduría al tumulto cotidiano, del silogismo a la protesta, de la razón a la pasión, mire en la vida y obra de Fray Luis de León cómo también en el aparentemente adormilado siglo XVI, la cátedra no quedaba lejos de la cárcel, ni eran vidas paralelas la del maestro y la del juez, ni los estudiantes ignoraban, aunque con otros nombres para idénticos lugares comunes, cuestiones de gobierno y libertad de cátedra al lado de las súmulas y quodlibetos escolásticos