Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Durante los últimos cien años los narradores nacidos o radicados en el norte del país se han multiplicado, alimentando con sus historias un imaginario colectivo que se desenvuelve en líneas fronterizas, desiertos, cadenas de montañas y urbes populosas donde habitan o deambulan lugareños y migrantes, gringos extraviados e indígenas supervivientes, seres de carne y hueso y espectros surgidos de realidades alternas.