Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
Los poemas aquí reunidos juegan en verso a las adivinanzas.Algunos son traducciones de la Antología Griega y fueron compuestos hace más de dos mil años. Otros son inventos actuales de José Emilio Pacheco, que continúan esa antigua y siempre renovada tradición.Las imágenes de Jesús Cisneros interrogan estos poemas y descubren una historia admirable.