Mirador en una cuerda floja tiene como primer objetivo cuestionar el realismo hollywoodense y someter a análisis su sentido oculto de manipulación y tergiversación. Mediante una organicidad que va ampliándose capitulo por capitulo, la propuesta de crítica cinematográfica se orienta hacia diversos aspectos: las dos primeras partes imitan a comprender el ejercicio de los medios masivos de comunicación como resultado directo de ese "realismo" de Hollywood y de su filosofía inferida; la tercera parte delinea la figura del "rebelde sin causa", en el cine estadunidense; la cuarta parte y el epílogo esbozan un panorama del tema en el contexto del espectador del cine hollywoodense. A su vez, todas estas partes dialogan con los anexos finales, donde se aborda especialmente un tema que debe ya plantearse: el conflicto entre tradición y ruptura. Escribe el autor: "Ese conflicto no es modo alguno marginal: se halla en la esencia misma de la modernidad, y afecta a cada uno de los actos individuales y colectivos en todas las esferas, y prioritariamente en la del arte".