Cuba es color y es espíritu. Sus balcones son escenarios que lanza, sin medida, piropos, música, baile, un olor a comino, a orégano, salitre y a su café. Se vuelve tuya hasta sin conocer a todos los que echan algo de menos, por que es fuerza y nostalgia, por es recuerdo. pero Cuba ya no es solo ayer, sino hoy y mañana. cuba es ron, es azúcar y es ahora también una nueva forma de vivir la gastronomía.