Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Dirigente y animador de empresas como Unifrance y Arte, Tocan du Plantier cuenta en estas páginas su experiencia en la industria del cine y la televisión a través de diversas anécdotas personales en la que recuerda sus batallas para mantener el cine francés; en sus propias palabras: "¿Tuve razón, tengo razón al hacer esa selección de los artistas frente al espectáculo hollywoodense, esa otra versión del placer? Así lo creo. Me parece que esa dimensión del espíritu me hace un buen soldado para la guerra santa, espiritual que se oculta tras la guerra de las imágenes".