Oliver Sacks vuelve a hacer gala de su singular talento como narrador, su sentido del humor y su inmensa cultura para plantear cuestiones que ponen en entredicho nuestra percepción del mundo y, muchas veces, nuestra propia identidad. Desde las visiones religiosas y su explicación fisiológica hasta el uso de drogas psicodélicas como puerta a una percepción interior que los sentidos nos niegan, los relatos del doctor Sacks van más allá del mero historial médico y constituyen una auténtica historia cultural de la percepción, un estudio antropológico de una supuesta anormalidad que no es, en el fondo, más que el reverso de lo que normalmente conocemos como realidad. «Fascinante. La comprensión del doctor Sacks hacia sus pacientes y su perspectiva filosófica transforman simples casos clínicos en relatos que iluminan las complejidades del cerebro humano y los misterios de la mente humana» (Michiko Kakutani, New York Times).
La mirada queda deten?a en volcanes, ventanas, patios y jardines, aparentemente en movimiento, hasta los objetos que componen la atmosfera de un espacio intimo. Destellos en un muro, entre floreros o frutas que multiplican formas, otra vez, de espacios: all?, la claridad es excesiva, pero tambi?n el resplandor de diversos colores, deslumbra en un recorrido desde el l?mite de la somnolencia hasta la temperatura de la ternura. Estos esplendores luminosos son caracter?sticos de la pintura de Vicente Gand?a, por ejemplo en la serenidad po?tica de Silla de El oscuro esplendor (1994) En el jard?n (1988) o en la lectura seductora de El oscuro esplendor (1994).La experiencia art?stica de Vicente Gand?a es una experiencia de los l?mites, y en cierta manera un intento de interrelaci?n o de transgresi?n de los mismos. Un estilo que se basa en la simplicidad de los objetos, en la eliminaci?n de los excedentes ret?ricos de la pintura, en su obra destaca la modulaci?n de los espacios y la orquestaci?n de lo no dicho, de lo descubierto a trav?s del arte. Gand?a ha domesticado el pincel y la naturaleza de sus cuadros, el espacio del universo.