No hay nadie más experta en los trabajos de media jornada que Beca: a sus 18 años no sólo es la mayor de cuatro hermanos, también es la compañera de combate junto a su madre para sacar a la familia adelante al la vez que estudia muy duro para las clases. Después de que su padre se marcharse sin ninguna explicación cuando ella tenía sólo 16 años, aprendió una gran lección: no te fíes de ningún tipo con sonrisa arrolladora y un imán natural para las nenas. A pesar de ello, pronto conoce a Alex, un enigmático y atractivo estudiante de Bellas Artes que puede hacer aparecer mágicamente mariposas en su estómago y que irremediablemente cambiará su vida para siempre mediante un giro inesperado del destino.
Una historia de amor auténtico, un amor que no tiene fin, un amor de dos caras que sólo es el principio. La novela New Adult que marca la diferencia.
En este libro, Estela, con un conocimiento implícito, logra exponer libremente su opinión sobre las distintas formas de crear el teatro. Pasa de la reseña a la entrevista, de la entrevista a la crítica, de ahí al ensayo para después aventurarse a estructurar sus afanes como creadora. Sin dejar de lado sus afectos, sus avenencias y desavenencias, logramos percibir su infatigable humor y el gran eco de su risa.
Ya afianzada en su experiencia como observadora profesional, en franco reto, conforma con sus textos una crítica más definida e inquietante; sus aficiones por la originalidad y el desafío en el espacio se manifiestan en sus preferencias y en exaltaciones muy señaladas. Es palpable que la irreverencia, las concepciones temáticas fuertes y las miradas que transforman el espacio la atraen sobremanera, y logra hacer un discurso coherente, lógico y sintético de las obras y coreografías que para los legos serían indescifrables.
Sólo una mirada y un entrenamiento tan agudo de la crítica pueden movernos a la discusión. Este Una mirada al teatro en México (2000-2010) tendría que ser un texto obligado no sólo para el periodismo cultural o para los que hacemos el teatro, sino una memoria viva de los que nos sentimos parte de este territorio llamado México.