En 1797 aaprecio en Holanda La nueva Justine o las desgracias de la virtud, seguida de la historia de Juliette, su hermana, Escrita por Donatien Alphonse Frocoise de Sade, esta monumental obra horrorizo al mundo como ninguna otra historia de la literatrura.
En toda esta selección de artículos, la vena satírica de Larra parece interminable cuando habla de los característico de la España de su tiempo: machismo, burocracia, estafa pública, usura , insulsez y vaciedad de la prensa, falta de crítica, presunción chovinista, incivilidad y un sinfín de defectos más que le arrancaban lo mismo la burla que el desprecio. Pero Larra no hace solamente una crítica del momento, él defiende una visión y un orden de ideas que buscaban la salida a un ambiente gris y confuso. Si el gobierno y la política, las corrientes ideológicas, las costumbres y las pulsiones sociales marcaban los tortuosos caminos de indecisión, confusiones y tergiversación de los frágiles valores en la sociedad, era entonces necesario despedirse de sus glorias y sus triunfos centenarios.