Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
En el tercer libro sobre su iniciación como hombre de conocimiento, Carlos Castañeda desanda camino hasta los primeros tratos con su maestro, el brujo yaqui don Juan, y añade al recuento de prodigios las arduas labores de disciplina física y mental que desde un principio lo preparaban para un acto decisivo de poder. La historia se cierra con el relato del viaje al que alude el título, intimación de la soledad y la áspera belleza de tal vida.