Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
Los primeros en darse cuenta de que Inés no estaba fueron los pájaros. Daban vueltas piando y reclamando alrededor de la banca del bosque donde, cada tarde, la princesita se sentaba a tirarles trigo, arroz y alpiste. Los últimos que la vieron recordarían que iba entre las garras de un dragón. La desaparición de la princesa Inés es el punto de partida de este breve relato que describe la sagacidad de un paje, un aprendiz de escudero y un colibrí para traerla de vuelta al castillo. La travesía estará llena de peligros y retos, así que los tres valientes amigos tendrán que recurrir una y otra vez a su imaginación para enfrentar al temible dragón; sin embargo, pronto se darán cuenta de que éste es más astuto de lo que suponen y que la única manera de vencerlo es si consiguen hacerle las preguntas precisas