El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Los primeros esbozos de Demasiada pasión por lo suyo eran una serie de dibujos entre el costumbrismo y el surrealismo, desgarradores y a la vez desternillantes, que poco a poco se han ido convirtiendo en mundo propio. Un verdadero ecosistema, el ecosistema de los flipados, de los obcecados, de los que, terriblemente desorientados en este mundo, lo apuestan todo a una carta, sin saber muy bien por qué, sin saber muy bien para qué. Un compendio de personajes entrañables e inolvidables trazados con una voz y un dibujo personalísimos.