El periodista deportivo es la novela que consagró internacionalmente a Richard Ford, de quien Raymond Carver escribió que era «el mejor escritor en activo en nuestro país» y el crítico francés Bernard Géniès afirmó, en una encuesta en Le Nouvel Observateur, que «se está convirtiendo tranquilamente en el mejor escritor norteamericano». Frank Bascombe tiene treinta y ocho años y un magnífico porvenir como escritor a sus espaldas. Hace tiempo disfrutó de un breve instante de gloria, tras la publicación de un libro de cuentos, pero luego abandonó la literatura, o fue abandonado por ella. Ahora escribe sobre deportes y entrevista a atletas, a quienes admira porque «no tienen tiempo para las dudas o la introspección».Y escribir sobre victorias y derrotas, sobre triunfadores del futuro o del ayer, le ha permitido aprender una escueta lección: «En la vida no hay temas trascendentales. Las cosas suceden y luego se acaban, y eso es todo.» Lección que podría aplicarse a su fugaz fama como escritor, a su breve matrimonio o a la corta vida de su hijo mayor, Ralph, que murió a los nueve años. ¿Cuál es el drama que ha provocado el fracaso de su matrimonio? ¿Por qué Bascombe ha renunciado a la literatura? ¿Qué le anima, sino una «moral de la apatía», un vivir la vida de instante en instante, un rehuir el suicidio por los caminos de la deseada analgésica banalidad? El periodista deportivo es un implacable testimonio de los desencantos inevitables, de la corrosión de las ambiciones, del aprendizaje de los placeres mínimos que permiten sobrevivir.
Novela negra
FA - Ficción moderna y contemporánea
FH - Obra de misterio y suspense
Precio: $ 0.00
El complot mongol (Edic. película)
Rafael Bernal
Filiberto García, típico matón y antiguo verdugo de un general villista, tiene que terciar con el FBI y
la KGB para desmantelar una intriga contra la paz mundial que se anida en las calles de Dolores de
la Ciudad de México, el acriollado y mediocre barrio chino de la capital del país.
Entre las tiendas de curiosidades y los restaurantes de comida cantonesa, detrás de los fumaderos
de opio y los cafés de chinos, Filiberto García va descubriendo que la conspiración aparentemente
iniciada en Mongolia tiene más relación con los vaivenes y amarguras de la política nacional que
con las mafias orientales. Sin embargo, en su tortuoso camino deja atrás una docena de cadáveres
y un amor trágico que, finalmente, acabarán revelando al vulgar asesino el verdadero significado de
su vida.