Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
Este testimonio de Yasuaki Yamashita, sobreviviente de la bomba atómica lanzada en 1945 en la ciudad de Nagasaki, es una gran muestra del espíritu de supervivencia humano en situaciones críticas. Y deja una clara sensación de que en la guerra el drama no termina en el campo de batalla, sino que sus consecuencias persiguen a la humanidad, aún en la reconstrucción.