París, primavera de 1942. Bajo ocupación nazi la población capitalina vive con temor al
bombardeo aliado y a merced del contrabando, las desapariciones forzadas. Para Léon
Sadorski, inspector de policía modélico, anticomunista y antisemita, la política colaboracionista
de Vichy representa una oportunidad de ascenso social, mientras hace lo que mejor sabe:
extorsionar, perseguir y arrestar judíos, terroristas y miembros de la Résistance. Sin embargo,
su plácida rutina de acoso y derribo será puesta en jaque cuando la Gestapo le encomiende
una misión especial llena de traiciones, intrigas y dobles agentes.