Blaise Pascal (1623-1662) hombre de su tiempo, concilió el estilo del pensamiento directo con el arte de una retorica persuasiva, que empleaba a un tiempo la paradoja, el asombro y la sorpresa. Esta caracterÃstica estarÃa presente por igual en los dos objetos de su estudio: las ciencias fÃsicas y la antropológica cristiana.
Tras recorrer con asombro la geografía de México, los viajeros europeos del siglo XIX nos legaron testimonios cruciales para el registro de nuestra historia que, además, tienen un gran valor estético. Esta edición nos invita a mirar estas piezas como paisajes del alma extasiada ante el espectáculo mágico de lo Otro.