Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Este libro es un viaje que atraviesa una ciudad decadente y un cuerpo poseído por el demonio del rock. Parte de un brindis y llega al fin del mundo, un lugar idóneo para amortajar las tinieblas de la cruda con un vodka. En este compendio etílico, lleno de visiones urbanas y frases que no disimulan su irreverencia, Villalobos le ha prendido fuego a nuestros peores lugares comunes.