Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
¡No te comas mis tortuguitas! y Cuento de Melisa y Calixteno son dos piezas de Ricardo Pérez Quitt para niñosy niñas. En la primera se toman como personajes a los animales más desvalidos en vías de extinción y nos entrega una metáfora de los grupos humanos también más desportegidos. En la segunda pieza encontramos motivos de los cuentos tradicionales de la época medieval y los recrea con elementos propios, donde la música no queda fuera. Los diálogos quedan revestidos con una belleza que nos permite abogar por la propia la naturaleza gracias al lenguaje maravilloso que utiliza el dramaturgo.
