El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
A pesar de los avances cient?ficos y tecnol?gicos -quiz? incluso en parte debido a ellos-, nuestra ?poca se encuentra particularmente mal equipada para lidiar con un tema tan crucial como la muerte, en especial cuando se presenta de manera cercana, incluso intima. Aunque buena parte de nuestra vida consiste en prepararnos para muchas cosas, la muerte permanece como un tab? pavoroso, y son muy pocas las personas dispuestas a asimilarla de una manera correspondiente a su car?cter inevitable.