Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
Hazel Robinson nació en San Andrés Isla en 1935. En 1959 publicó unas treinta crónicas sobre el archipiélago, en "El Espectador" de Bogotá. Demostró gran dominio del castellano y naturales dotes narrativas. Su matrimonio, cuatro hijos y sucesivos viajes al exterior frenaron la actividad periodística, pero contribuyeron a la gestación de su primera novela, publicada en 2002. Las crónicas habían sido la semilla de su literatura, que se enriquecerían con otras dos novelas. La autora manifiesta su intención de narrar el pasado ignorado de las islas. La acción sucede a mediados del siglo XIX, cuando fue abolida la esclavitud.
Narra una historia de amor que trasciende el plano individual para volverse símbolo del mestizaje como camino y representación colectiva de una región. Por ello ha sido considerada por la crítica como una novela fundacional. Cuenta historias a la manera clásica, siguiendo un orden líneal con narrador omnisciente y una preocupación: no dejar que el interés del lector decaiga.
El mismo título de la novela es una expresión que condensa la actitud de resistencia de los raizales: "No give up!, !No te rindas!". El prologuista Ariel Castillo Mier destaca el desenlace de la trama: "El triunfo, tras silenciosa batalla, de los esclavos a través de sus ritos y su idioma, sus cantos y plegarias y la lúcida defensa de una visión del mundo regida por el ritmo en la que se evidencian las huellas de la africanía, los valores culturales del mundo negro, sus relaciones con la naturaleza, la música, la comunicación con sus antepasados".
El libro se encuentra en español e ingles.