Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Late en alguno de nosotros la necesidad de relatarse de un modo distinto al de conversación con un amigo o un ser amado. Para este fin la autobiografía acoge, casi invariablemente, una voz en primera persona y se resuelve en la recuperación de una trama perdida. Se va perlando así una vida novelada que confiere un sentido genuino a quien escribe y le hace conocer sensiblemente que ha vivido y que todavía está viviendo