Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
Miguel Ángel Asturias recreó la tradición prehispánica guatemalteca. La memoria ancestral, desconocida, quedó, gracias a su obra, incorporada a la aventura artística y cedió el papel de protagonistas de la ficción a los desheredados de la historia. Las antiguas historias del Quiché relatan que, en el alba del mundo, los dioses fracasaron varias veces en el empeño de crear al hombre, hasta que dieron con la sustancia adecuada para formar a la criatura definitiva: el maíz. Desde el título mismo, esta obra proclama su filiación con los indios de Guatemala, pero los hombre de maíz que pueblan sus páginas son los descendientes de aquellos que sobrevivieron a la Conquista, atravesaron diversas catástrofes de la historia guatemalteca y alcanzaron la época en la que Asturias los recreó en la primera mitad del siglo XX.