Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
Kallocaína es el nombre del suero de la verdad que el científico Leo Kall ha inventado para garantizar al Estado seguridad y estabilidad, pero la verdad se escapa a la instrumentalización y sus efectos son demoledores: el protagonista asiste horrorizado al surgir gradual de una conciencia individual y autónoma con la que intenta luchar.
Escrito en 1940, Kallocaína es una novela antiutópica, al estilo de 1984 que Orwell publicó unos años más tarde, inspirada en el apogeo del nacionalsocialismo en Alemania: una visión alucinada de una sociedad totalitaria en un futuro gris, dominada por un Estado policial que llega a invadir la esfera privada de los ciudadanos suprimiendo toda forma de libertad y reduciendo los hombres a máquinas, cuya función principal es reproducirse, obedecer y no sentir.