Ensayos de homenaje en el primer centenario del nacimiento del filósofo español, que abordan diversos aspectos de la obra de Ortega. Los cuatro trabajos dibujan con rigor algunos de los horizontes centrales del quehacer filosófico hispánico en el mundo actual.
Como el personaje de Borges que se propone la tarea de dibujar el mundo y termina descubriendo la imagen de su cara, el autor decide investigar las reglas del juego, no siempre limpio, de la creación artística.