Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Jennifer Percy es abogada especializada en gestión de patrimonios e Ian Saint John es economista. Y miembro de la nobleza inglesa. Y famoso, uno de los solteros de oro que aparecen en las revistas del corazón. Trabajan juntos en un banco y se odian profundamente, tanto que en una pelea llegaron a las manos y Jennifer le rompió la nariz a Ian de un puñetazo. Desde ese incidente, nunca han vuelto a trabajar juntos, pero un acaudalado cliente exige que las mentes más brillantes de la oficina se encarguen de gestionar su patrimonio, y esas mentes son precisamente Jennifer e Ian. Los dos jóvenes se verán obligados a trabajar codo con codo, a pasar muchas horas juntos, incluso fuera de la oficina. Cuando son fotografiados cenando en un restaurante, la prensa del corazón asume que Jennifer es la nueva pareja de Ian, y él, cansado de tener que soportar a pretendientes que buscan su fortuna y su título, le propone mantener esa ficción a cambio de cederle a ella el cliente más importante del banco.Jennifer acepta, pero, poco a poco, tendrá que enfrentarse al hecho de que sus sentimientos hacia Ian están cambiando. ¿Será verdad que del odio al amor hay solo un paso?