Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
Había una vez un burro, que al ser viejo su dueño quiso sacrificarlo, cuando lo descubrió, salió huyendo. Durante su travesía a Bremen para convertirse en músico, conoció a tres personajes que huían de sus hogares por las mismas razones que él.