La autora, con casi un millón de seguidores en Instagram (@bymariandrew), cuenta lo que se siente dejar la comodidad de casa de tus papás y mudarte sola, datear hasta encontrar ahora sí al amor de tu vida, pagar las cuentas trabajando en lo que amas, lograr que no se te mueran los cactus (ni el gato) y resolver todas esas crisis de los adultos que siempre pensaste que no te tocaban. Despiertas tarde para el trabajo, nadie ha pagado el internet, no hay comida en el refri y tus gatos ya no tienen arena. ¡Sorpresa! Ya eres adulto y ni te avisaron.