Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Puede que Alvie Knightly se despierte en el Ritz, pero su vida no es un camino de rosas Primero, tiene la resaca de su vida. Segundo, su preciosa hermana gemela acaba de ser encontrada muerta en Sicilia y la policía la busca para interrogarla. Y por último, su nuevo y flamante novio ha desparecido con los millones que le robó a Beth. Pero no sabe con quién se ha metido. Alvie lo perseguirá hasta Roma en una frenética carrera en la que sólo uno puede sobrevivir Hay algo sobre mí que debes saber antes de que vayamos más lejos: mi corazón está en el lugar equivocado. Ahora no digas que no te avisé