Silencios vivos es una invitación a convivir en la intimidad de otro. Con estos poemas, Nach abre la puerta de su pequeño mundo al lector atrevido, dispuesto a volar. Letras que son emoción sincera, cargadas de anhelos, de confesiones y de introspección. El autor vuelve a asomarse a su propio interior para ofrecer una escritura llena de memorias y vivencias, para construir una forma voraz de cuestionar el mundo y dejarnos entrar en su paraíso silencioso