Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
1927. En Espinazo, Nuevo León, el Niño Fidencio hace milagros entre cientos de enfermos: tira manzanas que curan, pone emplastos de gobernadora y miel, con un trozo de vidrio abre cabezas y piernas infectadas, y difunde a su muy singular manera la palabra de Dios.