Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Todo comienza en la aldea, cuando el druida Panorámix pide a Ordenalfabétix pescado para hacer la poción mágica. Ordenalfabétix le dice que todavía no ha llegado de Lutecia, y Astérix y Obélix deciden ir a pescar a bordo de una vieja barca de Edadepiédrix. Una tormenta les arrastra hasta alta mar, y quedan parados en medio de una calma chicha. Tienen un encuentro con los piratas, a los que les quitan todo el festín que llevan para celebrar el cumpleaños del capitán, a cambio de no hundirles el barco. Obélix se come todo menos una manzana, que dejan como una pobre reserva. Agotados y hambrientos, al borde de la locura, Obélix se tira al mar en busca de jabalíes y al intentar rescatarlo, Astérix pierde el control de la barca y se quedan a merced del oleaje.