Esta obra relata el apogeo y la caída de Stefan Wilde, el zarévich, un inmigrante polaco en busca del sueño americano que habita y trabaja en el Panna María, un castillo en el corazón de Nueva York a principios del XX. Durante varias décadas, Stefan se ve envuelto en guerras políticas, mafias, prostitución, vidas que nacen y vidas que se pierden, relaciones cambiantes y amores prohibidos, al mismo tiempo que la ciudad que llama su hogar se va transformando con el devenir de los acontecimientos históricos y, por ende, su vida y su forma de ver el mundo también se alteran.