Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Jana tiene casi diez años y vive con su abuelo. Desde hace algún tiempo ha sentido que piedras de diferentes tamaños presionan su cabeza. Incluso llegó a creer que le crecerían piedras en lugar de cabello; aunque, luego de sus visitas al hospital, ya no le queda ni un solo pelito en su cabeza. Mi vida con las piedras es una historia fuerte, contada en primera persona, que muestra la particular forma en la que una pequeña da imagen y significado a su enfermedad.