Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Siete sabias y una reina reúne trabajos que se centran en el estudio de algunos personajes femeninos presentes en los libros de caballerías hispánicos del siglo XVI. Mujeres que viven y actúan al margen de la sociedad, que por determinadas circunstancias son antagonistas de los personajes principales y tienen una poderosa carga didáctica al interior de la narración. Su función, en el desarrollo argumental de las obras, es altamente significativa desde un punto de vista literario y social.
Con frecuencia, los personajes femeninos al margen están vinculados con el conocimiento y práctica de la magia, son hadas o seres sobrenaturales. Otras son mujeres que aprenden las artes mágicas y se auto excluyen, pues resultan altamente peligrosas para aquella comunidad y para el desarrollo de la acción. Encabeza la lista Medea de hondas raíces grecolatinas, le sigue la maga Florisdelfa, discípula de Merlín, y luego la intelectual infanta Melía, quien deja la vida social y se hace a la vida salvaje; conocemos a Artimaga y sus pactos diabólicos a la encantadora doncella Lindaraxa y la misteriosa sabia Oligas; cierra el repertorio la reina Ginegra, ya envejecida y celosa. Mujeres transgresoras y marginadas, que fueron orilladas por las fuerzas ideológica de la sociedad del siglo XVI en que se les enmarca.