Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Un nuevo Humboldt y un atribulado meteorólogo se debaten entre su campo de estudio y el discurso oficial. Atletas en ascenso o decadencia ven su tropiezo en la cancha, el diamante o el ring convertidos en demencia, asedio o prisión política. Espectadores obsesivos interrogan retratos y fotogramas en busca de claves para su propia existencia. Jóvenes presas de los ídolos, de la amistad traicionada, de la soledad que imponen los exilios caen en las trampas de su propia obsesión. En suma, los personajes de esta veintena de relatos cargan todos, con aplomo o con desmayo, con humor, ironía o melodrama, el peso de una historia que es a la vez la de América Latina y la de la humanidad entera.