Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
¿Por qué una nueva biografía de Hannah Arendt? Porque el autor ha tenido acceso a documentación hasta ahora desconocida, que permite explorar nuevos ángulos y enriquecer la comprensión de una de las pensadoras más relevantes de la historia contemporánea. Porque presta especial atención a dos momentos cruciales de la vida de Arendt: su estancia en París tras su huida de Alemania y sus primeros años en Estados Unidos. Porque desvela el compromiso de la filósofa con la causa judía y su participación directa en la salvación de niños y jóvenes frente al nazismo. Porque el pensamiento de Arendt se ha revelado como uno de los proyectos intelectuales más lúcidos del siglo pasado, y esta nueva aproximación a su figura nos desvela a un personaje más complejo de lo que hasta ahora creíamos.