El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Hoy los padres se preocupan de que sus hij@s usen smartphones, de que puedan ser adict@s a los videojuegos, de que al ser multitasking no puedan concentrarse, y también les produce mucha ansiedad que sus hij@s puedan subir fotos inadecuadas a la red, que hagan ciberbullying o, peor aún, que sean víctimas de este. Estas preocupaciones, aunque naturales, no siempre son las correctas.