Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Pirañas y polillas, Pancha -una cotorra-, y Desdémona -una boa-, innumerables moscas, piojos, un gato y un perro llamado Chamuco, zopilotes y mariposas negras son protagonistas de los diez cuentos que conforman esta obra, que de inmediato nos remite a importantes escritores que han abordado el tema de los animales; cabe recordar a Juan José Arreola, quien los consideraba imagen del hombre. ¿Será que nos identificamos con algunas especies? ¿Se da en ellas una transmutación de nuestras cualidades y defectos? (¿Quizá se gesta una simbiosis indestructible?) ¿Son los animales la metáfora de las pasiones humanas, o tal vez mensajeros de terribles presagios? ¿Son de verdad como espejos que nos revelan y confrontan?En Casi humanos de Cecilia Pérez Grovas (ciudad de México,1951) acaso encontremos la respuesta a alguna de estas interrogantes. La autora entreteje las historias con prosa ágil y amena. Su escritura está llena de humor e ironía. La presencia de los mamíferos, aves o insectos es palpable en cada una de estas narraciones, y su sombra se sigue deslizando en nuestro espíritu una vez finalizada la lectura.