Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
En Anuario mínimo (1960-2010) el poema explora sus límites con la autobiografía pero también, siguiendo una tradición moderna, expone la crítica de sí mismo, el recuento de su propia génesis. Eduardo Chirinos vierte aquí las claves para leer el conjunto de su obra: repasa su relación con el lenguaje, la música, la familia, la tradición literaria y las distintas geografías que lo han acompañado. Libro radicalmente personal, Anuario mínimo bucea, sin embargo, en un fondo común a toda experiencia poética. La cronología que recorre las edades del autor esconde el azar objetivo de las asociaciones, del mismo modo que el fragmento en prosa articula un ritmo del que no está ausente la conciencia cabal de las palabras, su depurada fuerza.