Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
¿Quieres saber quién construyó la primera máquina de vapor, el número de millas que mide el tren más largo del mundo, lo que es un semáforo y lo que conecta a un payaso con un tren? El libro es un cuaderno para jugar, para que los niños se diviertan; contiene datos interesantes y hechos relacionados con los trenes, su historia y los lugares donde ferrocarriles juegan un papel importante; en él los lectores viajarán a espacios desconocidos, tan vastos como el tren Siberiano o a espacios tan estrechos como una litera. Hay páginas de trivia, de juegos y de información. El libro estimula la creatividad de los niños, los anima a dibujar, pintar, recortar, colorear... El cuaderno para jugar Locomotora, patrocinado por Galería Nacional de Arte Zach?ta, en Polonia, fue premiado en el Concurso Internacional Illustration Startup 2012 y también por la editorial Wytwórnia. Informa a los niños sobre un medio de transporte que, aunque fue importante en la historia y el desarrollo de nuestro país, hoy no existe más