Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
Horacio Kustos es un viajero que llega tarde a la historia de la exploracióm. Si hubiera nacido en el siglo XVI, en el XVIII, incluso a principios del XX, hubiera tenido la oportunidad de llegar a alguno de los grandes territorios que entonces estaban por descubrirse y colocarse claramente en los mapas. Habría sido Cristóbal Colón, Vasco de Gama, Roald Amundsen o algún otro de los muchos que pasaron a la historia por su valor por su audacia y también por lo extraño, lo maravilloso, lo nuevo, de los lugares que descubrían.