Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Llegar a ser CEO, o Director Ejecutivo, es sinónimo de la cumbre en la vida. Una persona con ese cargo parece colmada de virtudes y talentos, generadora de empleos y riqueza. El CEO lleva a todos de la mano con dirección al éxito o al fracaso. Peter Bloom y Carl Rhodes realizan en Sociedad CEO un análisis detallado y desmitificador acerca de esta figura corporativa que han impuesto las grandes compañías trasnacionales y que se colocan en el imaginario social como una especie de deidades. Ellos deciden destinos de hombres, corporaciones e incluso de países, además de inspirar una serie de publicaciones de superación personal corren maratones, practican deportes excitantes, disfrutan de sus grandiosas propiedades y viajan a lugares exóticos. Siempre campeones. Siempre perfectos. Para los autores de esta obra, todo ello está sobredimensionado. Es una ilusión. Una nueva manera de manera de hacer capitalismo.