Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
Por el nivel uniforme del suelo que ocupa, por la regularidad y anchura de las calles o por lo grandioso de las plazas públicas, México debe contarse sin duda entre las más hermosas ciudades que los europeos han fundado en ambos hemisferios