Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
El libro recorre los servicios políticos, religiosos e históricos que las falsificaciones han prestado a la comunidad y da cuenta, además, del deseo de los escritores de ir más allá en su creación de mundos posibles para que la ficción suplante a la realidad. Las falsificaciones, que reescriben y revisan lo que conocemos y nos conforma, atentan contra el orden establecido, contra la historia y contra la historia literaria.