El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
En 1949, el mismo día en el que recibió la sentencia del tribunal noruego que le juzgaba por un supuesto delito de traición a la patria, Hamsun, un anciano de ochenta y nueve años que había pasado de ser el escritor más amado de su país al más odiado, escribió la frase final del manuscrito que se convertiría en su último l ibro,