El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
El lenguaje de los árboles es ese lenguaje que sólo los que tienen el corazón dividido, mitad en el cielo, mitad en la tierra, pueden escuchar. Sobre todo si son niños o niñas más dispuestos a creer en la magia del amor. Ese amor es el que une a las nubes con las hojas de los árboles y llena los silencios de significado. Esta bella historia de un niño y su abuelo nos enseña que la muerte, el dolor y el miedo forman parte de la vida.